Hoy un juramento… ¿y mañana?

Juró respetar por Dios, la Patria

y su padre, el Estatuto de la

Federación de Periodistas 

Nota del editor – Con su venia, amigo lector, esta vez salto del marco noticioso habitual de esta página para tocar muy rápidamente la crisis en que miembros de su directorio han puesto a la Federación de Periodistas del Perú, que han realizado, como se describe seguidamente, acciones contra el Estatuto de la institución, animadas por apetitos de índole personal que debieran ya estar desterrados del ámbito institucional.  

Hace poco menos de tres años, el recientemente elegido presidente de la Federación de Periodistas del Perú (FPP), Ángel Sánchez, juró ante unas 300 personas, entre periodistas e invitados y sus propios familiares, que respetaría el Estatuto de la institución.

Edificio de la FPP en el centro de Lima

Recuerdo que de acuerdo con la fórmula de protocolo, se le interrogó: “¿Juráis por Dios, la Patria y estos Santos Evangelios, cumplir y hacer cumplir los Estatutos de la Federación de Periodistas del Perú’”.

Y el flamante dirigente respondió: “Por Dios, por la Patria, y por mi padre aquí presente, sí juro”.

Minutos después, su padre, el veterano reportero gráfico Oswaldo Sánchez, se acercó a mi asiento y me invitó a pasar al estrado “para saludarlo”, algo que hice sin resistencia, felicité al nuevo presidente con un apretón de manos y un abrazo y le deseé, con toda sinceridad, buena suerte en sus funciones.

A la luz de recientes acontecimientos que señalan el interés de Sánchez de perpetuarse en el sillón presidencial, queda demostrado que juró en vano el nombre de Dios al que invocó en aquel solemne acto, y que a la vez se llevó de encuentro el honor de su padre y su familia que se encontraban presentes para la ocasión.

No hay sanciones materiales para esas acciones, sino morales, y solo ante las autoridades del Poder Judicial, podría ser enjuiciado por perjurio si miente luego de prestar juramento para decir la verdad y nada más que la verdad. En los ámbitos en que se encuentra la FPP, esto no es posible, ¿o sí? Alguien con conocimientos del Derecho podría decirlo.

Reunión en Pisco

La modificación del Estatuto de la FPP. fue en un congreso convocado al caballazo en la lejana ciudad de Chanchamayo, con la intención probable de que no asistieran sino los adictos que también desearían eternizarse en sus cargos de presidentes de Centros Federados que les brindan honores y, quizá también, prebendas de otro orden.

Como todo parecía estar preparado con diabólica minuciosidad, el Comité Electoral presidido por Tedy Arévalo, cuya vigencia legal es de tres años, fue destituido sin más ni más en otra reunión fuera de Lima, cuando se nombró un nuevo Comité Electoral adecuado para los fines que el aún presidente Sánchez perseguía.

El estatuto  de Chanchamayo, lo llamaré así por comodidad idiomática, hizo pasar el más terrible bochorno institucional a quienes intentaron inscribirlo en la Superintendencia Nacional de Registros Públicos (Sunarp) que en su primer párrafo señala tajantemente: “Señores: Se tacha el presente título de conformidad con el art. 42 Inc. A del Reglamento General de los Registros Públicos, por existir defectos insubsanables”.

A pesar de todo, las acciones ilegales del directorio prosiguieron y el Comité Electoral a la medida de los fines de Ángel Sánchez, convocó a elecciones, de acuerdo con el espurio estatuto de Chanchamayo, y adivinen. ¡Hay un solo candidato llamado Ángel Sánchez Dueñas!

Así lo dice el Comité Electoral elegido a la medida, que proclama a toda voz: “Revisados los documentos pertinentes y no habiéndose recepcionado (sic) ninguna impugnación o tacha, el COELNA. Resuelve: publicar oficialmente a la única lista que tendrá el número 01 para participar el 13 de septiembre 2015 en el SUFRAGIO NACIONAL”.

En un mensaje anterior, me permití llamar la atención sobre el riesgo que significa para la estabilidad institucional todo este cúmulo de acciones ilegales. Ahora lo hago nuevamente en un esfuerzo por convocar a la concordia y a que quienes se hallan en la peligrosa pendiente de la ilegalidad, reflexionen y encaminen sus actos hacia el mejor destino de la Federación de Periodistas que todos deseamos. (Luis Eduardo Podestá, expresidente de la Federación de Periodistas del Perú).

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