jueves, 3 de septiembre de 2015

Se acerca El Niño feroz

El fenómeno climatológico
más destructivo de los últimos
65 años nos toca la puerta

Este “niño” parece haber llegado a la madurez, no se parecerá en nada a los de los años 1972-1973, 1982-1983 y 1997-1998 y, por el contrario, será “monstruoso”, advirtieron funcionarios de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), al informar sobre una elevación extraordinaria de la temperatura de las aguas del Océano Pacífico, frente a las costas de América Latina.  

El Niño no tiene contemplaciones
En un documento emitido recientemente, la OMM señaló que en agosto las temperaturas del Pacífico subieron entre 1.3 y 2 grados centígrados, por lo que El Niño de este y el próximo año, será de “magnitud fuerte”.

El documento señala que en agosto pasado, ciertas áreas del Pacífico Tropical registraron “anomalías de hasta 4 grados centígrados”

Luis Alfaro Lozano, director de Meteorología del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología del Perú (Senamhi) dijo en una entrevista con la agencia DW de Alemania, que en el Perú “tenemos 55 por ciento de probabilidades de que El Niño sea entre fuerte y extraordinario”.

Aguas del Pacífico se calientan
“Si continúan estas condiciones, esperamos tener para noviembre o diciembre señales más claras tanto de la intensidad del fenómeno como del impacto en el régimen de lluvias en el país”, añadió el funcionario.

Según la OMM El Niño que se acerca tendrá consecuencias más graves que las del 97-98 que “causó pérdidas por 33.900 millones de dólares en todo el mundo” y en lo que toca a pérdidas económicas, señala que Latinoamérica fue la más afectada con 18 mil millones de dólares mientras unos 117 millones de personas “se vieron afectadas y más de 4.8 millones perdieron sus hogares”.

En el Perú se ha comenzado a tomar precauciones frente al fenómeno, con preocupación especial sobre las poblaciones vulnerables a las lluvias, gran parte de la cual, ha construido viviendas en los cauces secos de ríos y en quebradas donde es previsible se produzcan inundaciones y aluviones por efecto de lluvias desacostumbradas.

Lluvias torrenciales causarán inundaciones
Funcionarios de los servicios de Meteorlogía indicaron, asimismo, que El Niño que se avecina afectará la Reserva Nacional de Salinas y Aguada Blanca, ubicada en la cordillera de Arequipa y afectaría la enorme ganadería de vicuñas, que producen la lana más fina del mundo y tienen su hábitat en esa área, debido a que quedarían sin alimento y buscarían emigrar hacia otras zonas.

Al respecto el jefe de la reserva, John Machaca Centty, dijo a la prensa local, que aparte de la escasez de pastizales que generaría mortandad, las vicuñas podrían salir de la reserva hacia pastizales pero quedarían a merced de los cazadores furtivos que merodean en zonas donde no existe personal que vigile a ese valioso camélido.

Emigrarán por falta de alimento
Señaló que “los cazadores buscan la fibra de las vicuñas, una lana que en el mercado puede llegar a valer hasta 2 mil dólares el kilo”.

Las autoridades señalan que solo en la provincia de Caylloma, habría ocho distritos, Caylloma, Callalli, Sibayo, Tuti, Tisco, Lari, Yanque y San Antonio de Chuca, que sufrirían en mayor grado las consecuencias de una sequía previsible, como ocurrió en los anteriores periodos de El Niño.

Por otra parte, el barco Callao de la Armada Peruana, fue encargado del transporte de módulos de vivienda temporales destinados a pobladores del departamento de Piura, a 1.050 kilómetros al norte de Lima, para albergar a las familias que se vieran afectadas por el fenómeno, informó el Ministerio de Vivienda Construcción y Saneamiento (MVCS).

Preparan módulos temporales de vivienda
Otro barco transportará equipos médicos y una planta desalinizadora de agua de mar que será instalada también en Piura.

Otra tarea que sea encargado a las autoridades locales es la limpieza de cauces secos de ríos y quebradas, que en épocas de lluvias suelen convertirse en torrentes desbocados que arrasan con cuanto encuentran a su paso.

Lo lamentable es que en esos cauces, miles de familias en todo el país, con la anuencia de las autoridades han levantado sus viviendas con los materiales que han podido, en ocasiones muy precarios, lo que las convierte en eventuales víctimas de aluviones y desbordes.


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