martes, 14 de octubre de 2014

Bolivia… ¡qué país tan salado!

En el salar de Uyuni
está la esperanza de su
bienestar económico

Bolivia, que será gobernada los próximos cinco años por Evo Morales, quien al ganar las elecciones del domingo último asumirá su tercer periodo presidencial, posee un luminoso futuro económico en el salar de Uyuni, donde existen reservas de 140 millones de toneladas de litio, el mineral del futuro, que el mandatario se propone explotar.

Salar de Uyuni, paisaje de otro planeta
El salar de Uyuni tiene una superficie de 10 582 kilómetros cuadrados, y es una inmensa llanura blanca debido a sus 10 mil millones de toneladas de sal, situada en el altiplano al suroeste de Bolivia, en el departamento de Potosí.

Los expertos afirman que contiene, además, una de las mayores reservas de litio en el mundo, equivalentes a 140 millones de toneladas, de acuerdo con datos de la Corporación Minera de Bolivia (Comibol). También tiene otros minerales como el potasio, el boro y el magnesio.

Hace poco más de tres años, Morales anunció que Bolivia tenía la intención de industrializar con sus propios recursos el litio del salar de Uyuni.

Uyuni también es atractivo turístico
Los otros dos grandes salares de América del Sur, también ricos en litio, son el de Atacama, Chile, en región que fue territorio boliviano hasta antes de la Guerra del Pacífico que Chile con el apoyo de Gran Bretaña declaró a Perú y Bolivia, y el de Hombre Muerto, Argentina, son explotados por concesionarios extranjeros.

Los tres son denominados “el Triángulo del Litio” que poseen más del 85 por ciento de las reservas de litio conocidas del planeta.

Morales ha prometido que Uyuni será gestionado y financiado por el Estado, para lo cual cuenta con un crédito de 885 millones de dólares provenientes de su Banco Central.

Medios de prensa sudamericanos coinciden en señalar que “el crecimiento de la economía, ha posibilitado una disminución de la extrema pobreza y la incorporación a la clase media de un 20% de la población”, se sustenta en el alto precio del gas y a la exportación de materias primas.

Tercer gobierno para mejorar la economía
En el curso de su campaña electoral, Morales reiteró su intención de convertir a Bolivia en un centro energético de la región en los próximos cinco años.

En el caso del litio, el Gobierno boliviano pretende orientar sus exportaciones al mercado asiático para producir baterías de móviles y otros usos para coches eléctricos.

El litio tiene numerosas aplicaciones, desde la creación de fuegos artificiales de color rojo hasta su utilización como refrigerante, baterías desechables y recargables, para fabricar teléfonos móviles, para absorber neutrones en la fusión nuclear, y entre otros usos, combinado con otros metales (generalmente aluminio, cadmio, cobre o manganeso) para hacer piezas de aviones.

Tiene enormes reservas de litio
El hidróxido de litio y el peróxido de litio se utilizan para purificar el aire en submarinos y en las naves espaciales y en el área médica el litio se emplea en el tratamiento del trastorno bipolar y la depresión.

El ministro de Economía y Finanzas Públicas, Luis Arce, destacó las virtudes del modelo boliviano implementado hace nueve años. Dijo que es la combinación de lo económico con lo social; una fórmula que permitió estimular el mayor desarrollo registrado en la región.

Añadió que “Bolivia lo que ahora pretende ser es un gran jugador en el mercado mundial como productor de alimentos, y no solamente queremos exportar alimentos en su etapa básica, queremos exportar alimentos con valor agregado”.


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