Matones
de Keiko atacan
a
quienes rechazaron su
presencia
en Barranca
Una vez
más, los matones que acompañan a la candidata presidencial Keiko Fujimori, hija
del dictador Alberto Fujimori, reaccionaron a golpes contra ciudadanos que
rechazaron su presencia en Barranca, a 175 kilómetros al norte de Lima.
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| No quieren a Keiko en su ciudad |
El
diario La República informó el martes que “en Barranca la violencia electoral se tiñó
de naranja (el color de las banderas del dictador japonés). El fin de semana un
grupo de fujimoristas golpeó a ciudadanos que se expresaban en contra de su
candidata Keiko Fujimori”.
Añade
que los “fujimoristas atacan con golpes a quienes se expresan en contra de
Keiko”, y acompañó a la información un video bastante elocuente de la forma
como los seguidores de la candidata hija del japonés, entienden la opinión
ajena.
El
periodista Yofré López, del portal Barranca.pe, grabó el video de la agresión, que permite apreciar al detalle los actos de
violencia cometidos por los seguidores de la hija del dictador.
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| Matones de Keiko atacan a joven que protestaba |
López
refirió que minutos antes del paso de la caravana encabezada por Keiko Fujimori
por la galería Barranca, localizada en una de las calles principales de esa
provincia, “varios simpatizantes del fujimorismo aparecieron de pronto y
agredieron al grupo de jóvenes que se había apostado ahí para protestar
pacíficamente en contra de la candidata de Fuerza Popular”.
El
periodista recalcó que “fueron los fujimoristas quienes comenzaron el ataque,
pues se acercaron para arrancharles las pancartas y empujar y golpear a quienes
se resistían”.
“La
consigna era evidente: limpiar la zona de detractores para que, cuando pase por
ahí la caravana naranja, pareciera que no hubiera quien se opusiera a su
intención de llegar a Palacio de Gobierno”, comentó.
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| Así protestaron en Chimbote |
López
aseguró que los manifestantes no pertenecían a un partido político, sino que “eran
jóvenes de diferentes colectivos de defensa de los derechos de las minorías
(entre ellas los LGBT) y de trabajadores estatales, es decir, agrupaciones no
políticas que rechazan la candidatura de Fujimori por considerarla un legado de
quienes gobernaron en los años 90.
Los
opositores a Keiko “no pasaban de los gritos y la exhibición de pancartas en
los que recordaban la corrupción instalada en el gobierno de su padre, las
violaciones de derechos humanos, así como la política de Estado de la esterilización
forzada a miles de mujeres pobres del país”, declaró el hombre de prensa.
Esta no
es la primera vez que la hija del dictador recibe el rechazo de pobladores
hartos de la corrupción que temen el retorno al Perú del régimen más corrupto
de su historia.
También
en Huancavelica, el viernes 26, “representantes de diferentes colectivos
civiles salieron a la calle para protestar contra Keiko Fujimori” porque “rechazan
el olvido”.
El 14
de febrero en Arequipa también hubo una protesta de ciudadanos contra la
presencia de la candidata y el congresista Joaquín Ramírez, que la acompañaba, llamó irresponsablemente terroristas a quienes protestaban y amenazó a un camarógrafo de prensa que solo cumplía
su labor.
Antes se
han producido también manifestaciones de ciudadanos contra la presencia de la
hija del dictador en Chimbote, Huamanga y Huancayo.
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