domingo, 18 de noviembre de 2012

Távara en el Jurado Electoral

Asumirá el lunes un
juez de amplia y
limpia trayectoria

Desde mañana lunes, el Jurado Nacional de Elecciones (JNE), uno de los organismos más importantes de la república que garantiza la consolidación de la democracia en el país, estará presidida por el magistrado supremo Francisco Távara Córdova, quien ha reiterado que su actuación será transparente e imparcial.

Távara nuevo presidente del organismo electoral

Távara, piurano de nacimiento de 61 años de edad, quien proviene de las canteras del notariado trujillano, es un juez de amplia y proba trayectoria. Fue jefe de la Oficina de Control de la Magistratura (OCMA) entre julio de 2002 y diciembre de 2006, para asumir en enero del año siguiente la presidencia de la Corte Suprema hasta diciembre de 2008. Actualmente desempeña la dirección de la Academia de la Magistratura.

Sucedió al vocal supremo Hugo Sivina Hurtado, quien por otra casualidad, es hoy también presidente del JNE. Távara será sucesor del mismo en esta ocasión.

Reclama un presupuesto adecuado para el Poder Judicial

Su paso por la OCMA marcó una época de modernización de los elementos de control y del desarrollo de operativos sorpresivos para capturar a los malos funcionarios del Poder Judicial literalmente con las manos en la masa, por lo cual eran inmediatamente suspendidos o expulsados de acuerdo con la gravedad de su infracción.

Su paso por la Corte Suprema se caracterizó por la férrea defensa de este poder del Estado frente a los otros poderes.

En el Museo de la Justicia creado por él

En el boletín mensual Gaceta de la OCMA, escribió alguna vez: “Los tiempos que corren, cuando en el contexto de la globalización se ha producido una crisis internacional que afectará también a nuestra patria, las responsabilidades de un Presidente de la Corte Suprema se verán multiplicadas por la situación interna, habida cuenta de que los poderes políticos, por lo general, se sienten renuentes a considerar al Poder Judicial como uno de los tres Poderes que es parte del equilibrio del Estado, con todas las atribuciones que le fijan la Constitución y las leyes”.

Eran los días en que el magistrado supremo Javier Villa Stein fue elegido titular del Poder Judicial. Y en el mismo boletín, Távara escribió: “Junto a él (Villa Stein) estaremos en todo momento, en los momentos gratos y sobre todo en aquellos en que necesite de la solidaridad, de la colaboración y del esfuerzo sin medida de todos nosotros. Así se lo ofrecemos para que el éxito de su gestión se convierta en el éxito de todo nuestro Poder Judicial”.

Citas nacionales e iberoamericanas

Durante su gestión en la presidencia de la Corte Suprema, se realizaron varios congresos nacionales de magistrados con cuya concurrencia y experiencia se trataba de modernizar y mejorar la impartición de la justicia, y varias reuniones internacionales, entre ellas la XV Cumbre Judicial Iberoamericana, que reunió a magistrados de 22 países de habla hispana y observadores de otras nacionalidades.

En su gestión comenzó a aplicarse el Nuevo Código Procesal Penal en distintos puntos del país.

Fue muy activo en reclamar los fondos necesarios para que la nueva norma se extendiera a la mayor parte de distritos judiciales el país, en el entendido de que con ella se haría realidad una justicia rápida que ahorraría no solo dinero sino sufrimientos y preocupaciones a los implicados en los procesos.

Antes del fin de una cordial amistad

En una entrevista publicada ayer por Domingo, el suplemento semanal del diario La República, Francisco Távara responde a preguntas de difícil respuesta, pero las resuelve con solvencia y claridad.

Entre ellas, el periodista Emilio Camacho le recuerda que entre los 18 jueces que votaron por el para su Presidencia del JNE no se encontraba Villa Stein, e insinúa que “es su enemigo en la judicatura”.

Tavara respondió: “No sé si es mi enemigo, pero es evidente que no me tiene ninguna simpatía. Nuestro trato en la Corte Suprema es protocolar”.

El nuevo presidente de JNE es un incondicional admirador de César Vallejo, y durante su administración, promovió homenajes y certámenes para exaltar la figura del vate trujillano dentro y fuera del país.

En su reciente entrevista con Camacho, informó que está trabajando en una tesis sobre “la justicia en la obra de Vallejo”.

Católico practicante y devoto del Señor de los Milagros, del Señor de la Justicia y de San Judas Tadeo, el nuevo presidente del JNE afirmó que es absolutamente respetuoso de la Constitución y las leyes y no tiene compromiso con nadie, cree que “la democracia debe defenderse usando todos los mecanismos que le da la ley”, que “el Perú necesita cambios a favor de los pobres, ahora que tenemos unas reservas internacionales con las que podríamos pagar la deuda externa al contado”, y que “me considero un progresista pero debemos recusar tajantemente de la violencia como instrumento de cambio”.

Luis Eduardo Podestá

1 comentario:

Emilio Camacho dijo...

Muchas gracias por comentar la entrevista. Saludos.