Hace 25 años, el sátrapa
atropellaba al Perú y el
periodismo peruano protestaba
Veinticuatro horas después del día en que, hace
25 años, el sátrapa japonés Alberto Fujimori, atropellaba al país y lo sometía
a vivir bajo una dictadura abyecta que lo erigió en el consenso de la
transparencia mundial como el octavo presidente más corrupto del mundo, la
entonces digna Federación de Periodistas del Perú (FPP), alzaba la voz para
protestar y reclamar el retorno a la democracia.
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| Vocero de la FPP en lucha contra la dictadura |
El Comité Ejecutivo Nacional reunido de
urgencia emitió el siguiente comunicado de prensa:
“El Comité Ejecutivo Nacional de la Federación
de Periodistas del Perú, en sesión de emergencia cumplida el día de hoy, ante
los graves acontecimientos que confronta el país, ha tomado los siguientes
acuerdos:
“1° - La FPP, de acuerdo con su tradición
democrática, expresa su más firme protesta por la quiebra del sistema
democrático que el pueblo peruano conquistó en 1980, tras doce años de
dictadura militar, y que se ha traducido hoy en el cierre inconstitucional del
Parlamento Nacional.
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| Denuncia y llamado internacional |
“2° - La FPP denuncia que efectivos militares
han aplicado censura a diferentes medios de información de Lima, hecho que
constituye un atropello contra la libertad de prensa y la libertad de expresión
y ubica al país en un sistema de vida incompatible con la de una sociedad
civilizada.
“3° - La FPP formula un llamado a las
instituciones internacionales de prensa y defensa de los derechos civiles, a
fin de promover una corriente de opinión mundial a favor de la libertad de
prensa en el Perú, de la democracia como insustituible forma de gobierno y de
los derechos ciudadanos que la Organización de las Naciones Unidas y la
Constitución del Perú consagran.
“4° - La FPP formula una sincera invocación al
gobierno, para que retome el curso de la vida democrática y civilizada, bajo
los ordenamientos de le Constitución y las leyes con cuyas normas puede y debe
lograrse la moralización, la pacificación, el desarrollo y el bienestar que
todos deseamos.
“Lima, 6 de abril de 1992.
Otro comunicado en el mismo tono de protesta y
reclamo del estado de derecho, fue emitido por el Comité Ejecutivo el 28 de
abril, como una demostración de que la institución de los periodistas del Perú,
no iba a dar tregua a la naciente dictadura.
Ambos comunicados fueron aprobados en todas sus
partes por el Congreso Extraordinario de la FPP desarrollado los días 22 y 23
de mayo del mismo año.
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| Le cantó su obsolescencia |
El Congreso de los periodistas peruanos decidió
emitir un pronunciamiento que “reitera la vocación democrática de la institución
y destaca que el estado de derecho y la constitucionalidad son las únicas
garantías para el ejercicio de un periodismo libre que contribuya a formar la
opinión de la ciudadanía”.
La revista Primera Plana de la FPP de entonces,
en su número 50, publicó en portada una gran foto del edificio del palacio de gobierno
custodiado por una tanqueta y un gran titular que decía “Los dictadores están
obsoletos”, t´tulo también de su nota editorial.
En esta nota, la FPP asumía el compromiso de “defender
el irrestricto ejercicio de la profesión…” y concluía: “… los dictadores han
sido arrimados en el desván de la obsolescencia en un mundo que enrumba hacia destinos
superiores por obra que buscan su verdadera realización en una sociedad justa y
solidaria”.
Hoy, el dictador que inició su aventura hace 25
años y corrompió el país hasta límites inimaginables, purga condena por
crímenes contra la humanidad y corrupción.
En ese tiempo de aciagos recuerdos, el Comité
Ejecutivo de la FPP estaba presidido por Luis Eduardo Podestá Núñez, e
integrado por Bernardino Rodríguez Carpio (Vicepresidente), Pablo Riojas
Bereche (Secretario de Organización), Amador Navarrete Canales (Actas y
Archivo), Ricardo Vásquez (Defensa), José Hermoza Anguerri (Disciplina), Óscar
Vargas Romero (Cultura), Antonio Ponce Felles (Seguridad Social), Manuel San Martín
(Cooperativas), Luis Guerrero Uchuya (Interior), Guillermo Sendón (Exterior), Pedro
Arévalo (Prensa), Lucio Abenzur (Delegado ante centrales sindicales), y Diógenes
Puente de la Vega, Jorge D’Acunha y Fernado Florez Aráoz (Comisión e Patrimonio
y Ética).
Bueno es recordar a este directorio porque
entre ellos, figuran colegas que ya no están entre nosotros y merecen el
homenaje de un saludo en esta fecha.
Lo lamentable, hoy nuestra gloriosa Federación
se halla administrada por un mudo directorio que ha hecho de la usurpación y la
ilegalidad su principal bandera. (Luis Eduardo Podestá).
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