jueves, 12 de marzo de 2015

A 200 años de la muerte del poeta-soldado

Homenaje a Mariano Melgar,
fusilado por los españoles
en Umachiri un día como hoy

Quizá un poco tarde, la sociedad peruana se dio cuenta de que debía el homenaje de rescatar sus huesos, al poeta y prócer arequipeño de la independencia del Perú, Mariano Melgar Valdivieso, fusilado a los 24 años de edad junto a otros patriotas, el 12 de marzo de 1815, en el mismo campo de Umachiri donde las fuerzas del rebelde Mateo Pumacahua, fueron derrotadas el día anterior.

Momento a Melgar en la Plaza Umachiri
La búsqueda de los restos de Mariano Melgar ha sido incesante, es posible que se extienda sin éxito a cien años atrás, y por lo que a mí me corresponde, solo sé que en 1950, los buscadores tuvieron un fracaso más cuando intentaron encontrarlos en una demolida capilla del cementerio general de La Apacheta.

Arequipa tiene el recuerdo vivo de Melgar en el distrito metropolitano de Mariano Melgar al este de la ciudad, que incluye como su plaza mayor a la Plaza Umachiri, un parque circular que da acceso a las urbanizaciones que se alargan casi hasta las vecindades del macizo PichuPichu y hasta las faldas orientales del Misti.

También lo recuerda en su Parque Melgar frente al Museo de ARte Contemporáneo de Arequipa y las instalaciones del Ferrocarril del Sur y en la calle céntrica que se origina en el crucero con la calle San Pedro y termina en Zela, una vía que a través de los años conserva su carácter tradicional y está debidamente protegida como parte del Centro Histórico Patrimonio Cultural de la Humanidad.

Mausoleo que pretende un homenaje en el cementerio
Pero lo más significativo es que Arequipa ha tratado por todos los medios, de perennizar su homenaje ante los restos reales de Mariano Melgar y todos los esfuerzos han sido infructuosos.

En el cementerio general de La Apacheta hay un mausoleo que quiere evocar al poeta de los yaravíes, pero no es coherente con la realidad histórica.

Fusilado junto a otros nueve patriotas

El periodista e historiador Manuel Rodríguez Velásquez, veterano investigador de las búsquedas de los restos de Mariano Melgar, recuerda que “Melgar fue fusilado junto a otros nueve patriotas el 12 de marzo de 1815 en el mismo campo de batalla, donde el día anterior fueron derrotadas las fuerzas de Mateo Pumacahua”.

Añade que es posible que su cuerpo y el de los nueve compatriotas hayan sido enterrados y olvidados muchos años en el mismo lugar y el tiempo y la humedad provocada por un río cercano, hayan disuelto los huesos".

En el mismo lugar donde fue fusilado hace 200 años
Refiere que el 1 de diciembre de 1950 cuando se demolía la antigua capilla de La Apacheta para remplazarla por una nueva, un grupo de personas, que creían que los restos de Melgar se encontraban enterrados allí, hizo excavaciones y encontró numerosos huesos, “que quisieron hacer pasar como los restos del poeta”.

“La verdad es que los referidos huesos pertenecían a mujeres de corta edad , según los análisis forenses practicados poco después”, precisa Rodríguez, quien vive actualmente en Arequipa, es autor de un libro sobre Melgar y la búsqueda de sus restos y accedió a conversar sobre el tema, justamente el día en que se evoca el bicentenario de la muerte de Melgar.

Recuerda que se nombraron numerosas comisiones para investigar y buscar los restos y ninguna tuvo éxito.

Dejó los hábitos por amor

Mariano Melgar fue un intelectual desde muy joven. Estudió filosofía y teología y recibió las órdenes religiosas menores en 1810, pero colgó los hábitos cuando se enamoró de María Santos Corrales, a quien llama Silvia en sus poemas y cuyos padres se opusieron tenaz y exitosamente a cualquier relación con el poeta.

Mármol conmemorativo a su memoria
Melgar se enroló en las fuerzas rebeldes de Mateo Pumacahua que iniciaron su lucha por la independencia del Perú en 1814 y estuvo a cargo de la artillería durante la batalla de Umachiri, fue tomado prisionero, juzgado sumariamente por un tribunal realista y condenado a muerte.

Algunos historiadores señalan que cuando los ejecutores de la sentencia intentaron ponerle una venda en los ojos la rechazó: “Póngansela ustedes que son los engañados porque América será libre antes de diez años”.

Sus proféticas palabras se cumplieron
Su palabra se cumplió y en 1824, con las batallas de Junín y Ayacucho, las fuerzas del rey de España se rindieron y firmaron la independencia por la que Melgar murió nueve años antes.

Autor de numerosos yaravíes que se cantan hasta hoy y son, dicen los críticos, “una especie de himno de la patria chica”, Melgar es considerado “uno de los fundadores de la literatura peruana contemporánea”.

Que estas líneas sean un personal homenaje para el prócer y el poeta, cuya soledad le inspiró cantos que trascendieron los siglos para estar presentes no solo hoy sino en la eternidad de la Arequipa en que nació.

(Imágenes de prensa de Arequipa y Google maps)


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